La adaptación cinematográfica de Borderlands, dirigida por Eli Roth, se enfrenta a una semana de estreno tumultuosa, plagada de una recepción crítica abrumadoramente negativa y una controversia crediticia. Rotten Tomatoes actualmente muestra una desalentadora calificación del 6% de 49 críticos, con críticos destacados como Donald Clarke (Irish Times) y Amy Nicholson (New York Times) entregando críticas mordaces. Las primeras reacciones en las redes sociales se hicieron eco de este sentimiento y describieron la película como "sin vida", "terrible" y "sin inspiración". Si bien un segmento de fanáticos de Borderlands aprecia la acción y el humor, el puntaje general de audiencia sigue siendo un modesto 49 % en Rotten Tomatoes.
Además de los problemas de la película, recientemente surgió una controversia sobre trabajos no acreditados. Robbie Reid, un aparejador independiente responsable del personaje Claptrap, reveló públicamente en X (antes Twitter) que ni él ni el modelador recibieron créditos en pantalla. Reid expresó su decepción, particularmente dado su consistente historial de crédito en películas anteriores, y atribuyó la omisión potencialmente a su salida y la del artista del estudio en 2021. Reconoció esto como un problema común, aunque desafortunado, de la industria, al tiempo que expresó su esperanza de que la situación pueda mejorar. conducir a un cambio positivo con respecto a las prácticas de acreditación de artistas. Los desafíos de la película Borderlands, por lo tanto, van más allá de las simples críticas negativas y resaltan problemas más amplios dentro de la industria cinematográfica.